Nuestro sistema de trabajo se adapta desde el negocio u oficina más pequeña a la empresa más grande, siendo nuestros principales clientes, Asesorías fiscales y contables, Notarías, Ayuntamientos, Juzgado, distintos departamentos de La Administración, Clínicas, Farmacias, Mutuas, Despachos profesionales, Sindicatos y sobre todo, la Empresa en general.
Se personaliza la recogida en función de la cantidad de información delicada que cada cliente produce, lo que será estudiado por nuestro departamento de catalogación, orientándose sobre la frecuencia, semanal, mensual, trimestral o sencillamente cuando se nos solicite la recogida.
Si hace un cálculo aproximado del coste de la destructora y de su mantenimiento, como del tiempo que emplea su personal, los costes de electricidad, incidencias, riesgos de manipulación, etc… Llegará a la conclusión de que es mucho más económico, fiable y seguro la contratación del servicio que prestamos.
La ofimática personal para la destrucción de documentos no suele adecuarse a los niveles de seguridad que establece la Ley en función de las actividades empresariales. Por otra parte los documentos desmenuzados en diferentes cortes que proporciona su destructora se transporta a los contenedores de basura, desde donde podrían ser manipulados quedando su información
